lunes, 13 de septiembre de 2010

¿Y tu, qué tuvistes? ...Un Spectrum, un Commodore, un Amstrad, un MSX... (09-may-08 - 02:30)





Yo tenía un fabuloso Commodore 64k, y no sé por qué motivo mis padres me compraron ese y no otro... seguramente fuera porque mi primo tenía un Spectrum Sinclair 48k y quisieron comprarme uno con un poquitín más de memoria; la verdad, es que con el tiempo vi que era algo mejor, aunque eso sí, los juegos tardaban más en llegar.

Tenía dos puertos para los Joystick para poder jugar dos personas a la vez... también tenía un buen microship para el sonido, mejores gráficos y sobre todo esa unidad de cassete (marca Commodore) con esa particular conexción al ordenador que hacía imposible que pudieras adaptar otro aparato "pirateao".

Le tengo mucho cariño a aquella máquina la cual aún conservo en casa de mis Padres (gracias a mis hermanas por supuesto). Me compré infinidad de revistas y fascículos donde explicaban como hacer tus propios programas en el archiconocido lenguaje secuencial llamado BASIC. Recuerdo que el libro que traía el ordenador dedicaba el 90% de su contenido a explicar su código. Y era inevitable... ante aquella pantalla azul y celeste y ese cursor parpadeante debajo de aquella palabra "READY" no pude resistirme a hacer mis propios programitas, desde el típico.. "Adivina el número que la máquina ha pensado" hasta un programa "calculadora" que te resolvía problemas de geometría, física de E.G.B y alguna que otra ecuación...

Desde entonces, este ha sido uno de mis hobbys, programar en Basic. Y menos mal que este lenguaje no murió como muchos otros, al contrario, este lenguaje evolucíonó, desde el GW-BASIC, pasándo por el mejorado Quick Basic y su versión reducida Q-BASIC para el mítico MS-DOS y terminando en las distintas versiones de Visual Basic, incluso Visual Basic para Excel con el que tanto he escrito para hacer cositas para la oficina... pero como escribía Michael Ende en La historia Interminable... "Pero esa es otra historia y debe ser contada en otra ocasión".

8 comentarios:

  1. olrama escribió: 09-may-08
    El Commodore 64 jejeje que tiempos aquellos hermanito y que buenos ratos nos ha hecho pasar jugando con toda la familia: con Sylvia, con Sandra, con Sonia, con los “cuñaos”, con nuestros queridísimos primos, con tus amigos... en fin que el Commodore 64 no pudo llegar en mejor momento porque sin duda fue todo un descubrimiento que en muy poco tiempo revolucionaría toda la casa. Aún me acuerdo cuanto nos picabamos con el videojuego de las Olimpiadas, aquel de la natación, la Hípica, el tiro al plato, la jabalina y como no el triple salto, ahí si que nos enzarzábamos bien con el Joystick para superar nuestro record, por no mencionar lo que tardábamos en elegir la nacionalidad con aquellas banderitas porque todo el mundo quería escuchar el himno y cuanto más gente se apuntaba… más se tardaba en comenzar el juego… pero nos lo pasábamos muy bien. Aún me acuerdo del Azteca, el Rocky, aquel come rocas que comía diamantes, del Paperboy, uf tenías tres cajones lleno de cintas.

    Y te acuerdas cuando echaron la peli aquella tan famosa “Juegos de Guerra” que el protagonista entraba con su Commodore 64 y se conectaba con su teléfono al ordenador de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos creyendo que era un simulador de misiles…jajaja y nosotros lo veiamos y nos parecía aquello algo “INCREIBLE” jajaja aunque a día de hoy si la volvieramos a ver nos parecería algo cómica en vez de una peli de ciencia ficción J.

    Además de la peli, otra cosa con las que aluciné también fue con tu programita CORA, sin duda fue tu primer programa en BASIC y tanto Irene como yo, sobre todo Irene que seguía más tus pasos informáticos porque los míos fueron más bien musicales J, alucinaba con las cositas que hacía aquel programita.

    Y cuando apareció la disketera jajaja se acabaron aquellos días desesperantes con el cassette que tardaba en cargar los juegos.

    Ay que tiempos aquellos!! A los que no volvería jejeje…pero sin duda fueron inolvidables.

    Un beso Javier.

    ResponderEliminar
  2. olrama escribió: 09-may-08 (1ª Parte)
    El Commodore 64 jejeje que tiempos aquellos hermanito y que buenos ratos nos ha hecho pasar jugando con toda la familia: con Sylvia, con Sandra, con Sonia, con los “cuñaos”, con nuestros queridísimos primos, con tus amigos... en fin que el Commodore 64 no pudo llegar en mejor momento porque sin duda fue todo un descubrimiento que en muy poco tiempo revolucionaría toda la casa. Aún me acuerdo cuanto nos picabamos con el videojuego de las Olimpiadas, aquel de la natación, la Hípica, el tiro al plato, la jabalina y como no el triple salto, ahí si que nos enzarzábamos bien con el Joystick para superar nuestro record, por no mencionar lo que tardábamos en elegir la nacionalidad con aquellas banderitas porque todo el mundo quería escuchar el himno y cuanto más gente se apuntaba… más se tardaba en comenzar el juego… pero nos lo pasábamos muy bien. Aún me acuerdo del Azteca, el Rocky, aquel come rocas que comía diamantes, del Paperboy, uf tenías tres cajones lleno de cintas.

    Y te acuerdas cuando echaron la peli aquella tan famosa “Juegos de Guerra” que el protagonista entraba con su Commodore 64 y se conectaba con su teléfono al ordenador de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos creyendo que era un simulador de misiles…jajaja y nosotros lo veiamos y nos parecía aquello algo “INCREIBLE” jajaja aunque a día de hoy si la volvieramos a ver nos parecería algo cómica en vez de una peli de ciencia ficción J.

    ResponderEliminar
  3. olrama escribió: 09-may-08 (2ª Parte)

    Además de la peli, otra cosa con las que aluciné también fue con tu programita CORA, sin duda fue tu primer programa en BASIC y tanto Irene como yo, sobre todo Irene que seguía más tus pasos informáticos porque los míos fueron más bien musicales J, alucinaba con las cositas que hacía aquel programita.

    Y cuando apareció la disketera jajaja se acabaron aquellos días desesperantes con el cassette que tardaba en cargar los juegos.

    Ay que tiempos aquellos!! A los que no volvería jejeje…pero sin duda fueron inolvidables.

    Un beso Javier.

    ResponderEliminar
  4. Irrama escribió: 10-may-08 (1ª Parte)
    [esto es genial]
    Aaaayyy el Commodore 64k!! Qué voy a decir yo de este viejo y modesto ordenador que en su momento fue una de las mejores computadoras y claro está ahora no vale nada, pero leyendo vuestros post, queridísimos hermanos míos y si luego vosotros leéis el mío, deduciremos de forma evidente que si algún valor posee es tan sólo el sentimental, pues hay que ver cómo avanza el mundo y el mercado de la tecnología y de la informática que nos deja fascinados y boquiabiertos con tanto adelanto.

    He de decir que si aún permanece en casa es por mi lucha de varios años para que no pasara a mejor vida. Yo misma lo guardé con muchísimo cuidado, con todas las cintas, revistas y componentes que le acompañaba movida por la lástima de desentenderme de algo que para mí había sido tan importante en mi vida, pues por un lado me introdujo en lo que sigue siendo mi gran pasión "El mundo de las Tecnologías y la Informática" y por otro lado fue uno de mis mayores y mejores vínculos con una persona a la que quiero un montón.


    Nadie en casa entendía el porqué guardaba algo que era tan viejo e inútil ya, literalmente lo llamaban “chatarra”, el cual ocupaba un precioso espacio en el armario donde podía entrar otras cosas más importantes. Pues bien, creo que ésta es una buena ocasión u oportunidad para explicarlo y a lo mejor me entenderéis un poquito mejor.

    ResponderEliminar
  5. Irrama escribió: 10-may-08 (2ª Parte)

    Os lanzo la siguiente pregunta: ¿Alguna vez alguien al que queréis mucho os ha confiado o legado algo que era muy importante para él, sabiendo que lo ibas a cuidar muy bien porque también era importante para ti? Pues eso me ocurrió a mí. El Commodore 64 era ese algo tan importante para mi hermano Javier y que cuidaba muchísimo. Él me supo transmitir su pasión, curiosidades e inquietudes informáticas. Yo que me sentaba muchas veces al lado suya, alucinaba con las cosas que él hacía en ese ordenador, pues no sólo lo usaba para jugar, sino también para hacer música y sobre todo para programar, le sacaba todo el partido que podía ofrecerle aquella y hoy arcaica computadora. Yo era muy pequeña y para mí era increíble el ver cómo con un complejo código, que no todos podían cifrar, podía dar como resultado una agenda o una calculadora, en fin, podías hacer todo aquello que te propusieras, aunque dependías mucho del dominio que tuvieras... Me acuerdo cómo me explicaba las variables, los bucles, el “print”, el “input”,… que al final conseguía entenderlo a base de imitar sus programitas y gracias a que también me ayudabas a descifrar paso por paso lo que significaba cada orden conseguí hacer mis propios programitas, los míos claro está muchísimos más sencillos. Por cierto hermanito: eres bueno, muy bueno. Su opera prima se llamaba “CORA”, la cual guardará con mucho cariño en su corazón, del cual hizo numerosas versiones siempre en busca de mejorarlo o de encontrar la imposible perfección.

    Él me sigue enseñando sus programas y creaciones actuales y continúa transmitiéndome sus descubrimientos e inquietudes informáticas. También cuando tengo la ocasión yo sigo sentándome al lado suya alucinando con todo lo que hace.

    Gracias por enseñarme tu gran pasión, que también sin duda es la mía.
    NO CAMBIES NUNCA.
    Te quiero.

    ResponderEliminar
  6. Irrama escribió: 10-may-08 (2ª Parte)

    Os lanzo la siguiente pregunta: ¿Alguna vez alguien al que queréis mucho os ha confiado o legado algo que era muy importante para él, sabiendo que lo ibas a cuidar muy bien porque también era importante para ti? Pues eso me ocurrió a mí. El Commodore 64 era ese algo tan importante para mi hermano Javier y que cuidaba muchísimo. Él me supo transmitir su pasión, curiosidades e inquietudes informáticas. Yo que me sentaba muchas veces al lado suya, alucinaba con las cosas que él hacía en ese ordenador, pues no sólo lo usaba para jugar, sino también para hacer música y sobre todo para programar, le sacaba todo el partido que podía ofrecerle aquella y hoy arcaica computadora. Yo era muy pequeña y para mí era increíble el ver cómo con un complejo código, que no todos podían cifrar, podía dar como resultado una agenda o una calculadora, en fin, podías hacer todo aquello que te propusieras, aunque dependías mucho del dominio que tuvieras...

    ResponderEliminar
  7. Irrama escribió: 10-may-08 (3ª Parte)

    Me acuerdo cómo me explicaba las variables, los bucles, el “print”, el “input”,… que al final conseguía entenderlo a base de imitar sus programitas y gracias a que también me ayudabas a descifrar paso por paso lo que significaba cada orden conseguí hacer mis propios programitas, los míos claro está muchísimos más sencillos. Por cierto hermanito: eres bueno, muy bueno. Su opera prima se llamaba “CORA”, la cual guardará con mucho cariño en su corazón, del cual hizo numerosas versiones siempre en busca de mejorarlo o de encontrar la imposible perfección.

    Él me sigue enseñando sus programas y creaciones actuales y continúa transmitiéndome sus descubrimientos e inquietudes informáticas. También cuando tengo la ocasión yo sigo sentándome al lado suya alucinando con todo lo que hace.

    Gracias por enseñarme tu gran pasión, que también sin duda es la mía.
    NO CAMBIES NUNCA.
    Te quiero.

    ResponderEliminar
  8. Javiland escribió: 11-may-08
    ¿Guauuuu? Olga e Irene, con vuestras palabras, me habéis logrado sacar alguna lagrimilla, je, je, bueno, mejor dicho, casualmente, cada vez que os he leído, una mota de polvo se me metía en los ojos... "cachis..."

    De vez en cuando es maravilloso mirar al pasado y compartir momentos recordándolos, ya que estos, se reconstruyen desde el punto de vista de todos y así, de esta forma, afloran detalles que tristemente ya habías olvidado.

    Nunca os he comentado que desde que nacisteis, yo no aceptaba que la gente dijeran cosas del tipo "Son iguales... como dos gotas de agua", ... yo pensaba que no, que Olga era Olga e Irene era Irene, yo siempre os he distinguido desde pequeñas, era evidente y no entendía como los demás no lo veían. Luego, con el tiempo fuisteis creciendo y para mi alivio, vuestras personalidades eran distintas, a una le gustaba más la música y la otra la programación (para mí era una gozada porque fuera como fuera siempre estabais allí, escuchándome... bueno pues aún así, siempre había alguien que mantenía que erais "gemelísimas"... Lo cierto es que sabéis que no tengo preferencias, que no me decanto por ninguna de las dos, todo lo contrario, me encanta como sois, sufro por vuestras diferentes inquietudes y a la vez me alegro de vuestros diferentes logros y aciertos, yo sí que estoy orgulloso de vosotras por escucharme cuando erais pequeñas y por escucharme ahora y sobre todo por haber superado algo tan difícil como es llegar a ser distinta la una de la otra pero poniendo siempre por encima que sois hermanas. Os quiero un montón.

    ResponderEliminar